Jugador diferencial durante toda su carrera, un gran físico unido a su calidad individual hacen de Miguel un futbolista de excelente presente y futuro. Domina ambas piernas a la perfección y puede cubrir las posciones de extremo, en cualquiera de los dos perfiles, o de delantero, siempre tuvo una gran capacidad goleadora. Gran compañero, siempre antepone los beneficios del equipo al suyo propio, eso hace que con todos los entrenadores que ha tenido haya sido una pieza indispensable.